EL GATO NEGRO: Entre el misticismo y el misterio

GATO NEGROLos gatos, animales independientes que por su propia naturaleza son cazadores y solitarios, tienden a ver a los seres humanos como compañeros de su jauría, con lo que tampoco ven al hombre como presa. El gato es un animal que ha estado junto al hombre en la mayor parte de las civilizaciones; podemos destacar por ejemplo, el antiguo Egipto, época en la que fue considerado como animal sagrado, siendo venerado e incluso embalsamado tras su misma muerte. Bastet, era la diosa encargada de proteger el hogar y simbolizaba la alegría de vivir, una deidad dedicada a la armonía y la felicidad. Se representaba con la forma de gato doméstico o como una mujer con cabeza de gato, acompañada de un sistro -instrumento musical con forma de herradura, que lleva adosado unos pequeños platillos metálicos insertados a través de unas finas varillas, que se hacía sonar simplemente agitándolo-. Como curiosidad, aportar que los egipcios inoculaban a los gatos algunas gotas de su propia sangre para protegerlos de las enfermedades, plagas y cualquier mal espíritu. En esos tiempos estaba prohibido matarlos, y si alguien se atrevía y era descubierto, era condenado a pagar con su propia vida. Otra curiosidad es la que apunta a que los egipcios, cuando se moría uno de sus gatos, se afeitaban las cejas en señal de duelo. En 1890, durante unas excavaciones en las ruinas de Bubastis, fueron halladas enormes necrópolis con más de 300.000 momias de gatos. Fueron los griegos los que tras robar una pareja de gatos a los egipcios – a pesar de su negativa – comenzaron su crianza e iniciaron la expansión de la raza por toda Europa. Las culturas musulmanas también mostraron a lo largo de los siglos su especial cariño y aprecio por los gatos, debido a que el mismísimo Mahoma les prometió a estos animales un puesto en el paraíso. En la tradición Celta, se creía que los ojos de los gatos representaban las puertas que conducían hacia el reino de las hadas. En la Galia, la matanza de uno de ellos, era castigada con el pago de una oveja o cordero, o con el equivalente a la cantidad de trigo necesaria para cubrir completamente el cadáver del felino suspendido por la cola y con su hocico rozando el suelo. Pero no todo en la vida histórica de los gatos ha sido escrito en clave positiva; la imagen de estos pequeños felinos ha estado asociada al mundo oscuro, al lado del mal, relacionándose especialmente con la brujería, especialmente si eran de color negro. Se dice que eran files compañeros de las hechiceras y brujas, teniendo estas últimas, con la capacidad de convertirse en uno de ellos para asaltar a los incautos en los solitarios caminos, e incluso introducirse en sus casas y causarles maleficios. Las brujas tenían como fieles escuderos a los gatos, a quienes utilizaban como mensajeros. Fue en la Edad Media (a mediados del Siglo XIII) cuando nace la creencia de considerar a los gatos de color negro como portadores de la mala suerte, ya que eran considerados cómplices o mayordomos de las brujas. Y fue así como en esa época de odio y fanatismo religioso comenzó una terrible persecución contra ellos por parte de la corrupta y decadente Iglesia Católica, sacrificándose cientos de miles bajo la acusación de simbolizar al Diablo y ser brujas transformadas. Fue tan brutal el aniquilamiento de estas inocentes criaturas – no importando el color de su pelaje – que cuando la peste negra azotó a Europa en el siglo XIV, causo más de veinticinco millones de víctimas mortales, ya que apenas quedaban gatos que lucharan contra las ratas, propagadoras de la mortífera enfermedad. ¿Si no se hubiera exterminado a los gatos durante las décadas anteriores, se hubiera podido erradicar la peste con más rapidez?, la respuesta sin duda es un rotundo sí. En esos tiempos, incluso el Papa Clemente, en su obsesión por acabar con la Orden Templaria, se atrevió a acusar a los caballeros de la organización, de homosexuales y adoradores del demonio en forma de gato. No fue hasta el siglo XVIII con la llegada de la Reforma, cuando el pequeño felino volvió a recuperar parte de su esplendor anterior, convirtiéndose en el protagonista de bellas pinturas y esculturas. Los armadores de los barcos se hacían con algunos ejemplares felinos para acabar con los ratones a bordo de sus naves. ¿Cuánto hay de verdad o mentira en todas esas historias populares que adoptan como protagonista la imagen del gato? Conozcamos algunos ejemplos: Cruzarse con un gato negro -como ya hemos dicho- se considera símbolo de mal agüero, pero sin embargo su aparición en un banquete de bodas era señal de matrimonio afortunado. En el juego, se cree que pasar el billete de lotería por el lomo de un gato oscuro, es atrayente de la buena suerte. En muchas localidades rurales del norte de España, se creía que tragar pelos de gato negro servía para volverse loco, y si comías algo que previamente hubiera lamido un gato del mismo color era motivo para enfermar de por vida, pero si vemos a un gato saltar por encima de un ataúd, es señal de que el difunto regresará aparecido para pedir por las cuentas pendientes. En Escocia, un gato negro extraño en el porche significa un futuro próspero. En Irlanda, cuando un gato negro cruza la trayectoria de una persona a la luz de la luna, significa que va a haber una enfermedad epidémica. En Italia desde hace cientos de años se cree que si un gato negro se pone en la cama de una persona enferma, esa persona morirá al poco tiempo. Hace muchos años en Inglaterra, las esposas de los pescadores mantenían gatos negros en sus hogares mientras que sus maridos salían al mar en sus barcos de pesca, creyendo que evitarían que ocurriera algún peligro a sus maridos mientras estaban ausentes. No dejemos a un lado las supersticiones relacionada con lo meteorológico; si un gato se agarra a la ropa de su amo, no tardará en llegar tormenta. Si duerme con el lomo hacia arriba, se acercan heladas. Si se lava el hocico, es aviso de que las lluvias están cerca. Sea como sea, y más allá de estas creencias, el gato está viviendo actualmente una etapa tranquila junto al hombre (aunque siempre encontraremos a salvajes que llegan a maltratarlos sin motivo alguno). Y es que bien mirado, el gato – sea del color que fuera – es el perfecto compañero de piso, que va a lo suyo y solo viene a buscarte cuando necesita cariño y algo de roce. Feliz Noche de Brujas.

THE TREE OF LIFE: El árbol más solitario y aislado del planeta

THE TREE OF LIFESituado en el Reino de Bahréin, un diminuto país desértico formado por pequeñas islas en medio del Golfo Pérsico, se dice que podría ser descendiente de los árboles del Paraíso. Por lo tanto, algunos creen que es el lugar donde se situaba el mítico Jardín del Edén. Nos referimos a una resistente acacia, que ha sido bautizado con el pomposo título de The Tree of Life (El Árbol de la Vida), aunque su nombre en árabe significa la montaña de humo, debido a la neblina que a menudo le rodea. Con una edad aproximada de 400 años de edad, es digno de admirar como se mantiene obstinadamente verde en mitad del desierto, cerca del monte Jebel Dukhan. Está a 134 metros sobre el nivel del mar y es empleado como mezquita. El manantial de agua donde el árbol recoge sus nutrientes es todavía un misterio porque no existe ni una gota del líquido elemento en kilómetros a la redonda. Verdaderamente es increíble observar cómo un tronco de árbol, el único ser vegetal que allí prospera, se hunde en la arena del desierto, como si se resistiera a secarse y morir. Los científicos han especulado que la fuente de agua más cercana posible es un arroyo subterráneo a tres kilómetros de distancia y que de alguna manera saca agua de esa corriente gracias a sus profundas raíces, otros en cambio dicen que es capaz de captar la humedad de las brisas que soplan desde el Golfo Pérsico o extraer de alguna manera la humedad de los granos de arena. Según las leyendas locales, el árbol se encuentra en lo que alguna vez fue el bíblico Jardín del Edén, y por lo tanto tiene una fuente de agua mística, pero otra leyenda afirma que el árbol existe desde tiempos preislámicos y está protegido por el antiguo dios sumerio Enki. Como podéis imaginar, el árbol se ha convertido en una atracción turística local, ya que es el único de tamaño importante que crece en la zona y es visitado por aproximadamente 50.000 turistas cada año, y es muy popular por estar creciendo en medio de la nada, sin fuente de agua notoria y que por otra parte, nunca ha sido regado. El propio Bahrein es un país desértico con poca o ninguna lluvia durante todo el año y como resultado de esto, también se cree que alrededor del árbol se practicaban ritos antiguos. En octubre del 2010, arqueólogos desenterraron cerámicas de unos 500 años de antigüedad y otros artefactos en las proximidades del árbol. Un análisis del anillo del suelo y del árbol conducido hace más de 20 años concluyó que fue plantado aproximadamente en 1582. Fue en el 2013, cuando el gobierno decidió intervenir rodeando al árbol con un muro de hormigón empotrado y una valla con el fin de protegerlo del vandalismo. Es digno de admirar su resistencia a las condiciones extremas donde se levanta y ello lo convierte en una maravilla de la naturaleza.

SCIENCE: Un gran “experimento agrícola” de los EE.UU. oculta un arma biológica

Insect AlliesCientíficos del Instituto Max Plank de Biología Evolutiva en Plön (Alemania) y de la Universidad de Montpellier (Francia) así como abogados de la Universidad de Friburgo (Alemania) publicaron esta semana en la revista Science un artículo inquietante, en el que denuncian que un ‘revolucionario’ programa de investigación agrícola en los EE.UU. puede ocultar en realidad un objetivo diferente y mucho más letal. El experimento, financiado por la agencia militar DARPA (el siniestro brazo de investigación avanzada del Pentágono), emplea insectos para dispersar virus infecciosos modificados genéticamente sobre cultivos con el objetivo, aparentemente inocente, de reforzar su resistencia ante sequías, enfermedades o herbicidas. Sin embargo, según los autores del texto, la intención final puede ser el desarrollo de una potente arma biológica. Si ese fuera el caso, advierten, supondría una clara violación de los tratados internacionales que prohíben este tipo de armamento. El experimento de cuatro años, llamado “Insect Allies” comenzó en el verano del 2017 con una respaldo de 27 millones de dólares en contratos de investigación adjudicados a tres grupos académicos. Su principal característica es que emplea una técnica, la alteración genética ambiental horizontal (HEGAA), para introducir cambios genéticos en cultivos, pero no en el laboratorio, sino cuando ya están plantados. El virus modifica los cromosomas de las plantas, una alteración que previsiblemente puede aumentar su resistencia ante diferentes desafíos ambientales. La diferencia es que en este caso los virus no son dispersados a través de medios tradicionales, como equipos de fumigación, que se monitorizan y controlan con mayor facilidad, sino que DARPA pidió específicamente que se hiciera a través de insectos. Es en este punto en el que los autores del artículo encuentran motivos para la alarma. Para empezar, “controlar la propagación espacial y taxonómica de los virus será complicado”, alertan. Los insectos son, como es lógico, completamente impredecibles y los virus también pueden afectar a las semillas, no solo a las plantas en crecimiento. Además, a su juicio, recurrir a insectos no implica ningún beneficio y habría sido perfectamente posible el despliegue de equipos de rociado agrícola. “La única justificación que se ha presentado en un documento público es que la fumigación requeriría una infraestructura que no está disponible para todos los agricultores, pero es difícil imaginar que en EE.UU. no esté garantizado el acceso a estos equipos ante cualquier emergencia”, explican los científicos. No cabe duda que el enfoque de DARPA refleja la intención de desarrollar una tecnología ofensiva. El equipo cree que solo harían falta sencillas modificaciones en el método para generar una nueva clase de armas biológicas de acción rápida, armas que podrían destruir cualquier cultivo de un enemigo sin grandes equipos y sin la necesidad de pulverizar el agente tóxico directamente. Solo hace falta que los insectos se posen en los campos y podría usarse para causar daños a gran escala y potencialmente devastadores. Las plantas morirían o sus semillas quedarían esterilizadas. En la actualidad, el plan se ha puesto en práctica en invernaderos estadounidenses con plantas de maíz y tomate, mientras que las especies de insectos utilizadas incluyen saltamontes, moscas blancas y pulgones. La elección de los cultivos también intranquiliza a los investigadores. El maíz es una especie de la que dependen millones de personas, principalmente en América Latina y África, para cubrir sus necesidades nutricionales básicas. Según escriben en Science, la agencia militar descartó explícitamente los proyectos enfocados en plantas con implicaciones limitadas para la seguridad alimentaria mundial, como el tabaco o la Arabidopsis, una pequeña especie herbácea. Los autores desconocen si el programa ya ha tenido algún tipo de impacto en la bioseguridad y piden a DARPA una mayor transparencia en sus planes. Desde su punto de vista, la investigación viola flagrantemente la Convención sobre las Armas Biológicas, en la que participan más de 180 países. Este tratado internacional prohíbe desarrollar, producir o almacenar agentes o toxinas con fines hostiles. “El uso de estos insectos cargados de virus modificados, podría socavar seriamente las mejores prácticas y reglas que han contribuido a mantener nuestro mundo libre en gran parte del uso devastador de las armas biológicas desde hace más de 60 años”, señalan en el documento. Además, advierten de que el proyecto podría ser imitado con facilidad por competidores en cualquier parte del mundo con fines igualmente dudosos. Por ese motivo, “cualquier investigación biológica de interés debería justificarse de forma plausible como un propósito pacífico”, añaden. Preguntado por si temen algún tipo de represalia legal por su polémico artículo, se defienden que no han publicado nada secreto, solo la información que está disponible públicamente a través de DARPA o los investigadores. “Hemos sido extremadamente cautelosos para distinguir entre los hechos derivados de estas fuentes y nuestras conclusiones. Creemos que se requiere con urgencia un amplio debate social, científico y legal sobre el tema”, aseguraron. Sin duda, el planteamiento de que en invernaderos de EE.UU. se pueda estar desarrollando un arma biológica no pasará desapercibido.

EE.UU.: Los osos de Yellowstone vuelven a ser una especie protegida

BROWN BEARUn juez estadounidense ha ordenado que los famosos osos pardos que viven en el parque nacional de Yellowstone y en sus alrededores estén de nuevo en la lista de especies en peligro de extinción. Este fallo es histórico para la conservación de la vida silvestre en EE.UU. La medida significa que la polémica cacería deportiva de osos pardos en los estados de Wyoming e Idaho (fuera de los límites del parque) será cancelada de manera indefinida, extendiendo estas protecciones contra la caza que ha durado 44 años. Tim Preso, del bufete de abogados ambientalistas EarthJustice, que fue el abogado principal en un caso que impugnaba la eliminación de la protección de los osos, estaba eufórico cuando hizo declaraciones desde su oficina en Bozeman, Montana, luego de que se supiera la decisión.Preso también dijo que era «trascendental» dada la ambición de los cazadores por los osos pardos y las amenazas cada vez mayores para sus supervivencia en este siglo. Entre dichas amenazas se encuentra la del cambio climático, que ha afectado a un alimento clave del oso pardo, las semillas que se encuentran dentro de las piñas de corteza blanca. El juez Dana Christensen, que trabaja en un tribunal de distrito de Montana, había «hecho gran parte de los deberes cuando presentamos nuestro caso y, por eso, teníamos esperanzas», comentaba el abogado. «Este es un caso que será conocido y es una parte importante del legado de la conservación estadounidense. Hizo lo que tiene que hacer un juez: aplicar la ley sin ser influenciado por la política». Hay otras cuatro poblaciones de osos pardos en el norte de las Montañas Rocosas, de las cuales solo una es importante en tamaño. Salvar a los osos pardos de la extinción en el área de Yellowstone es considerado uno de los mayores éxitos de la vida salvaje. El número de osos ha repuntado hasta los más de 700 de los 135 que se contabilizaron hace tres décadas. Como tal, los estados de Wyoming, Montana e Idaho han hecho una fuerte presión para que se elimine a los osos de las protecciones generales. Sin embargo, todavía hay preguntas en torno a su recuperación. El argumento clave de Preso y sus colegas es que, como población insular de osos pardos, aislados y separados de otros grupos de osos, los osos de Yellowstone se enfrentan a continuos desafíos. La verdadera recuperación biológica, tal como se especifica en la Ley de Especies en Peligro de Extinción, dijo el juez, significa reconectar a la población de osos de Yellowstone con otras poblaciones en los 48 estados continentales. Esto no ha ocurrido. De hecho, la magistrada calificó de arbitraria y caprichosa la justificación del caso del Gobierno para eliminar a los osos de la lista de especies protegidas. Las autoridades encargadas de la vida salvaje, por su parte, expresaron su decepción. Los líderes del departamento de caza y pesca de Wyoming estaban ansiosos por autorizar la primera cacería de osos en dos generaciones, lo que habría permitido que se «capturaran» hasta 22 ejemplares este año. Ese plan fue recibido con una feroz protesta, incluyendo unos 650.000 comentarios de ciudadanos de todo el país y de todo el mundo oponiéndose a la matanza deportiva de criaturas que son un tesoro para Yellowstone, el parque nacional más importante de EEUU. Preso dijo que espera que los abogados de los estados apelen contra la decisión de Christensen y que probablemente se pongan de parte de grupos que defienden la caza como Safari Club International. El superintendente del parque nacional de Yellowstone, Dan Wenk, quien se retira luego de 43 años en el puesto, expresó su preocupación el pasado fin de semana en su fiesta de jubilación por la seguridad de los osos que deambulasen más allá de los límites del parque. Teme que puedan ser asesinados por los cazadores como sucedió en el infame caso de Cecil el león de Zimbabwe. Durante una entrevista en Wyoming, la semana pasada, Jane Goodall también defendió a los osos. «No deberíamos matar animales por diversión. Deberíamos celebrar que los osos pardos están vivos y no ir corriendo a dispararles», concluyó.