EL LENGUAJE DE LAS BALLENAS: Conversaciones en el fondo del mar

En las profundidades del océano, allí donde no llega la luz, el sonido es fundamental para la vida de las ballenas. No es solo su método para comunicarse con otros ejemplares o recabar información en un ambiente a oscuras, sino que, gracias a él, también conciben su autopercepción. Mientras algunas especies como la ballena azul emiten sonidos a muy baja frecuencia -imperceptibles para el oído humano- , otras como la ballena jorobada producen sonidos dentro de nuestro rango audible,dando lugar a su célebre canto. Los delfines, al habitar cerca de la costa, han sido un frecuente objeto de estudio acústico, sin embargo, delas ballenas todavía se desconocen numerosos aspectos al habitar entre 5 y 10 kilómetros mar adentro: “Se están haciendo expediciones en Marte,pero todavía no sabemos lo que ocurre el fondo de nuestros océanos”, explicó David Gruber, biólogo marino y líder del proyecto interdisciplinario conocido como CETI (Cetacean Translation Initiative,Iniciativa de traducción de cetáceos). “Al día de hoy, no se ha podido comprobar que cada sonido emitido ‘tenga un significado concreto’, pero sí sabemos que,gracias a ellos, las ballenas informan a otros ejemplares sobre su comportamiento, su estado anímico o incluso se jactan de un buen estado de salud para resaltar su atractivo a la hora de buscar una pareja” aseveró. “Los sonidos que emiten las ballenas pueden transmitirse a larguísimas distancias y su estudio es una ciencia muy reciente,así, por ejemplo, durante la Guerra Fría se pensaba que estas frecuencias procedían de sonares rusos”. Y añade que “una ballena en Escocia  puede estar conversando con otra en la costa de Nueva York”. Esto es posible porque en el agua el sonido se transmite mucho mejor, hasta 4 veces más rápido, y que, gracias a estas conversaciones intercontinentales, las ballenas logran establecer rutas migratorias,encontrar potenciales parejas e incluso buscar nuevas poblaciones con las que reagruparse al otro lado del planeta: “Son animales que recorren distancias enormes y que se mueven de un hemisferio a otro, dependiendo la época del año”.Pese a que en nuestro imaginario colectivo las ballenas son animales solitarios, en realidad son muy sociales; cuando se separan de su grupo para ira buscar alimento emplean la acústica para volver a reencontrarse con ellos, ya que cada uno tiene su propia voz y emite sonidos reconocibles para los demás.“El problema para nosotros los humanos, es que si bien podemos grabar los sonidos que emiten, no sabemos exactamente lo que dicen”, agrego. Al respecto, un equipo de investigadores  de CETI dirigidos por Gruber, está actualmente recopilando y analizando una serie de comunicaciones de ballenas. El motivo por el que los expertos han decidido estudiar los clics que producen estos mamíferos es porque cuentan con una estructura similar al código morse. El análisis de la forma de expresarse de estos animales marinos se remonta a la década de 1950, cuando se detectó por primera vez el sonido que emitían. Sin embargo, no sería hasta los años 70, cuando se descubriría que estos gritos tienen una función comunicativa. Por su parte, la Institución Oceanográfica Wood Holes señala que las ballenas pueden sumergirse más de mil metros,por lo que utilizan unos clics para la ecolocalización, un tipo de sonda. Este mismo mecanismo de clic también se utiliza en sus vocalizaciones sociales,aunque los que usan para comunicarse son más discretos, según el documento CETI. David Gruber, biólogo marino y líder del proyecto CETI, ha contado en una entrevista referida por Live Science que las ballenas «han sido muy difíciles de estudiar para los humanos». Sin embargo, considera que ahora «realmente tenemos las herramientas para poder analizar esto de una manera que no habíamos podido antes». De momento, el proyecto CETI dispone de grabaciones de unos 100.000 clics de ballenas que han sido recopilados por biólogos.Para obtener nuevos archivos de audio, el CETI ha colocado micrófonos subacuáticos en aguas frecuentadas por ballenas. Algunos pueden ser lanzados por drones en cuanto detectan una manada que se congrega en la superficie, e incluso peces robóticos que sigan y escuchen a las ballenas desde la distancia.Sin embargo, además de encontrar dificultades para descifrarlo, la investigadora de ciencia de datos para CETI, Pratyusha Sharma, considera que el idioma sería una barrera: «Supongamos que hay una palabra,’paraguas’. ¿Cómo sonaría en su ‘idioma’? ¿Sería ‘umbrell’ o es paraguas?»se preguntó.  «Ya sea que alguien venga de, digamos, Japón, de EE.UU. o de cualquier lugar, los mundos de los que hablamos son muy similares; hablamos de personas, hablamos de sus acciones», dijo Sharma. «Pero los mundos en los que viven estas ballenas son muy diferentes,¿verdad? Y los comportamientos son muy diferentes». Además, se sabe que las ballenas tienen dialectos, según un informe del 2016 de la revista Royal Society Open Science, que analizó las codas de nueve grupos de ballenas en el Caribe durante seis años. De momento, queda esperar a que haya una mayor investigación que permita a los humanos ‘hablar’ su idioma.