NIDOS DE LAS TERMITAS: ¿Inspirando los próximos refugios en la Luna?

De seguro, los primeros habitáculos de los astronautas en la Luna probablemente no sean tan sofisticados como la ciencia ficción imaginó. Mientras se encuentra el lugar ideal para edificar un laboratorio sobre el satélite y se transportan los materiales necesarios para la construcción, la tripulación de las futuras misiones probablemente dormirá en estructuras similares a termiteros. En efecto, el profesor Jekan Thanga y su equipo del Departamento de Ingeniería Mecánica y Aeroespacial de la Universidad de Arizona están desarrollando la tecnología para crear sacos de arena construidos por robots. Estas estructuras inspiradas en las termitas que viven en los desiertos más inhóspitos de Australia o África ayudarán a los astronautas a sobrevivir a las condiciones extremas de la Luna. La idea de usar el regolito lunar para edificar construcciones no es actual. En 1980, Nader Khalili, arquitecto fallecido de la NASA, presentó unos bocetos sobre cómo se deberían hacer sacos de arena para crear habitaciones en el satélite. La tecnología de su tiempo no le permitió explorar con la idea, pero pasado unos 40 años, un equipo de científicos decidió retomar la propuesta. Si se decide dar luz verde a la idea de termiteros en la Luna, un séquito de robots alunizará y usará el regolito, la tierra y los minerales de la superficie para sustituir los clásicos materiales de construcción en la Tierra. Los refugios con sacos de arena, de fácil y rápido montaje por robots, reducen el material que debe transportarse, proporcionan un buen control climático y protegen contra terremotos lunares y otros peligros, señala un comunicado oficial. En la Luna, las temperaturas pueden oscilar en extremo. Cuando el Sol llega directo a su superficie, los astronautas pueden experimentar hasta 214 grados Celsius, mientras que, en la noche lunar, compuesta de 14 días terrestres, la temperatura desciende hasta los -184 grados Celsius. La presencia sostenida y sustentable de los seres humanos en el satélite implica crear hábitats donde esas condiciones no presenten problema alguno, con el mínimo de recursos. Mientras tanto, la arquitectura natural de los termiteros permite una temperatura constante de 30 grados Celsius, sin importar que en el desierto el entorno fluctúe por casi 40 grados. El hogar de las termitas, a menudo referido como una construcción tipo catedral, ofrece refrigeración y calefacción por su sistema de túneles. “Los ambientes desérticos extremos que enfrentan las termitas son análogos a las condiciones lunares. Es importante destacar que todo este enfoque no depende del agua. La mayor parte de la luna es un desierto completamente seco», señala Thanga. Su equipo fue financiado por la NASA para desarrollar la tecnología de los termiteros como parte del programa Investigación Artemisa de Tecnología Espacial (M-STAR). Los científicos también están asociados con el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la agencia espacial de Estados Unidos y la compañía MDA, que desarrolla tecnología robótica para las misiones Artemis. Como sabéis, los viajes de Artemis fueron pospuestos por la NASA luego de detectar algunas anomalías con la tecnología que llevará a la tripulación a la Luna. La electrónica del soporte vital, el desgaste del escudo térmico de la cápsula de descenso y las reparaciones en la torre de lanzamiento fueron algunos de los principales motivos para prolongar la tan ansiada fecha. El primer alunizaje llegará no antes del 2026, mientras que los esfuerzos por crear laboratorios en el cuerpo espacial se prevén para el 2028.